lunes, 25 de mayo de 2015

La Gran Contradicción III: ¿Porque invertir en autopistas cuando lo que necesitamos es producir alimentos ?


En todas las experiencias de éxito de países con regímenes nacional - socialistas; la industrialización de sus procesos productivos; así como el desarrollo integral de su agricultura son temas primarios en la búsqueda de lo que denominamos Seguridad Alimentaria.


  Desde la China de Mao Zedong; con una población agrícola que representa la mayoría de sus habitantes y una economía agropecuaria de importancia estratégica (hasta el punto de contar con una universidad de la agricultura); hasta la Vietnam de Ho Chí Minh donde su sector agrícola ocupa mas del 50% de la mano de obra; y un modelo a seguir; incluso para nuestro país hermano Cuba. El desarrollo de la agricultura como objetivo primordial para el logro de la seguridad alimentaria ha sido la génesis de todo proyecto- país considerado exitoso.

Para nuestro comandante supremo, el desarrollo agrícola de su tierra, era siempre su preocupación constante. Desde los llamados a impulsar la agricultura y producción de alimentos hasta los Proyectos de Agricultura Urbana y Peri-urbana; pasando por la transferencia de tecnología de alimentos de nuestros hermanos iranies, chinos y argentinos. Los espacios en los cuales nuestro comandante supremo comunicaba la activación de una determinada planta procesadora de alimentos; era ya regular y frecuente. Y de manera personal, agrego mi satisfacción y alegría por los pasos hacia adelante de este gran estratega.

Se entendía entonces, la necesidad del apoyo de nuestros aliados en desarrollar nuestra industria agropecuaria; indiferentemente de las voces de organizaciones y entes de la economía agrícola venezolana, quienes se acostumbraron a manipular y monopolizar dicho mercado. Volvamos pues a nuestras tierras, tomemos de nuevo el arado que dejo nuestro comandante supremo y seamos el chófer de la maquina agrícola que impulse nuestro desarrollo.

Es prioritario el crecimiento de las comunidades agrícolas de nuestro país., convertirlos en orgullo nacional y que se sienta el orgullo de ser un agricultor venezolano. Otra preocupación constante de nuestro comandante supremo.

Entonces, ¿Cuando sucederá todo esto?, no es ahora el momento.... Dejemos pues de invertir en grandes infraestructuras de concreto y asfalto cuando lo que necesitamos es reactivar nuestra producción de alimentos; es necesario satisfacer nuestras necesidades humanas que son primarias. Lo demás... puede esperar.